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IBAGUÉ Y SU ANTIGUO PASADO CADENCIOSO EN LOS TEATROS.

Por: Laura Duque

El día en que Ana Laura se dirigía hacia el centro de la Ciudad de Ibagué a buscar información acerca de los antiguos Teatros que existieron en Ibagué, iba con toda la actitud positiva ya que su misión era escribir un reportaje de los antiguos Teatros, para dárselo a conocer a un público maravilloso que estaría presente en su evento de la Universidad, donde se llevaría a cabo en el Museo de arte del Tolima.

Eran alrededor de las 2:00 p.m. cuando ella empieza a contemplar cómo está el día, dirigiéndose a la Biblioteca Darío Echandía, pero antes de entrar se sienta en las escaleras de ese lugar, a pensar cómo sería el proceso de recolección de datos, mientras en sus pensamientos resalta que en el centro de la ciudad de Ibagué, a veces es un lugar armonioso, donde lo complementa las melodías de los músicos que tocan en ese lugar, también ve los diferentes tipos de trabajos formales e informales, donde resalta el arte y la cultura, describiéndolo así como un lugar que es transitado durante todo el día y las personas aún guardan recuerdos muy gratos de los antiguos Teatros.

Después de media hora, Ana Laura se dirige hacia los trabajadores de la Biblioteca y solicita algunos periódicos donde haya información acerca de los Teatros. Luego de unos minutos recibe algunos libros y empieza a leer para encontrar información, donde finalmente no encontró lo suficiente para su reportaje. Sin embargo, en esos libros mencionaban la programación de algunas películas y el Teatro donde las iban a presentar. En el Teatro Imperial presentaron la película “El oro de Mackenna”, en el Teatro Nelly, la película “No se mande profe”, en el Teatro Avenida, la película “Soy Yeye”, en el Teatro Metropol, la película “Llegan los paracaidistas”, y en el Teatro Tamaná, la película “Los muertos no cuentan” y “Tarzán y el valle de oro”.

Cuando Ana Laura termina de leer información en los libros, los entrega y se dirige a casa, no muy contenta ya que no había encontrado lo que estaba buscando, sin embargo no se da por vencida y se dirige hacia el almacén Panty Jeans para buscar información en ese lugar, ya que era allí donde antiguamente se encontraba ubicado el Teatro Nelly. Al llegar al lugar no encuentra información ya que los trabajadores que se encontraban en ese lugar, eran nuevos.

Sin embargo, al salir del almacén, se dirige hacia las personas que se encontraban alrededor del almacén, y luego de hablar con ellas, finalmente se lleva la grata sorpresa de encontrarse con Israel Gómez de 62 años de edad, un señor muy amable que lleva 30 años trabajando en un puesto donde vende mango con sal y limón. Con mucha amabilidad, se sentó a dialogar un rato con él, quien le empezó a contar un poco de su historia y afirma que los Teatros fueron muy importantes para los Ibaguereños, ya que en esa época había mucho respeto y el amor fluía entre las parejas y familias. También eran sus mejores planes los fines de semana, donde se divertían mucho con la película “Tarzán”.

Mientras Israel Gómez hablaba, en la mente de Ana Laura había una imaginación muy bonita acerca de los Teatros, tanto así que se imaginaba a ella viviendo esa época, viendo una película de Tarzán en esas salas de los Teatros, ya que en su memoria existe un recuerdo de haber visto esa película, pero proyectada en Dv’s, sentada en su casa frente al televisor, resaltando desde sus experiencias, el cine como una obra maravillosa donde el contenido es atrayente y cada efecto que lleva consigo, también la importancia de la reflexión que deja cada película y sobre todo, la emoción de esperar a que empiece el film.

Al caer el día, Ana Laura finaliza la conversación con Israel Gómez, y se dirige a su casa, con la esperanza de que cuando vuelva, pueda obtener suficiente información. Sin embargo, por el camino va planeando como hará su reportaje, ya que quiere que cuando él sea leído, produzca sentimientos y recuerdos valiosos como le pasó a ella cuando empezó la búsqueda.

Luego de varios días, al salir de clases, Ana Laura toma un taxi y se dirige al corazón de Ibagué, donde vuelve a visitar la Biblioteca Darío Echandía, pero no a solicitar libros, sino los periódicos de la Hemeroteca de ese lugar, donde encontró en los periódicos del Nuevo día, que en el año 1915 el señor Roberto Torres, compra unos terrenos en el costado sur de la carrera tercera entre calles 11 y 12 en pleno centro de la ciudad, para construir un Teatro por el famoso arquitecto Arturo Jaramillo, identificado inicialmente como TEATRO TORRES. Su diseño original correspondía a las características de estilo Francés, representado en palcos separados entre sí, adornados con decoración de este estilo, con capacidad para 125 personas sentadas y con una galería popular espacialmente integrada. Este diseño perduró hasta su primera remodelación en el año 1923, para presentar cine mudo, escenas de teatro, y zarzuelas de fama internacional, con artistas de gran renombre como “la Virginia Fabregas”.

En 1970 se presentó el film del mundial, donde todos los periodistas locales, numerosos dirigentes deportivos y funcionados de los Juegos  Nacionales, estuvieron presentes en la sala del teatro Imperial de la ciudad de Ibagué, en cuya pantalla se proyectó la película que recoge los aspectos más importantes, ocurridos durante el desarrollo del máximo evento deportivo del mundo, mereciendo el calificativo del mejor film.

Mientras leía esa noticia, para Ana Laura fue muy interesante ese dato, ya que ese momento fue muy importante, pero lo más curioso para ella, es poder imaginar un evento deportivo del mundo en una película, donde los deportistas son los anfitriones.

En ese mismo año, la casa de la cultura atendió inscripciones para el Cine- Arte donde se llevó a cabo en el Teatro Nelly, en los horarios de 10:30 a.m a 1:00 p.m y de 4:00 p.m. a 7:00 p.m. También fueron dadas en el Teatro Tolima, y esta oportunidad era exclusivamente para los inscritos en el Cine- Art.

Más adelante en 1984, desde el primer sábado del mes de Noviembre, empezó a funcionar en el Teatro Metropol un cineclub con los auspicios del Centro de Artes plásticas Roberto Ruiz. La programación empezaba a las 10:00 a.m. y los amantes del buen cine pudieron presenciar magnificas películas no solo de un alto contenido, sino del gran valor estético. Por lo tanto la programación se inició con la película de Billy Wilder primera plana con actores como Jock Lemon, Walter Mathu y la actriz Carol Brunett. Por lo tanto en estos proyectos, el objetivo no era solo que las personas pudieran observar la calidad del producto, sino también para resaltar el valor de la estética de la película, donde no se tenía tanto en cuenta los efectos.

El teatro Nelly se cerró en el año 2001, en ese mismo lugar, existió el teatro Doral, que estuvo allí durante 10 años. Luego de desaparecer este teatro, se llevó a cabo una remodelación con el fin de generar el proyecto del almacén que actualmente se llama Panty Jeans, el cual también ha tenido remodelaciones y ahora es mucho más amplio. Al cerrarse ese Teatro, los habitantes ya podrían tener la posibilidad de visitarlo y a su vez, más adelante estarían preparados para enterarse de que los demás Teatros también iban a ser cerrados debido a que la tecnología hacía mucho más fácil todo, ya que las películas que solo se proyectaban en los Teatros, podrían comprarse en el comercio, donde también vendían los Dv’s para que con ayuda de eso, las películas pudiera reproducirse y ver en el televisor.

Finalmente todas estas noticias dejan un vacío para los Ibaguereños, ya que los lugares que marcaron sus vidas, llenándolas de felicidad y recuerdos valiosos, se convirtieron en comercio y la esencia de esa época se había perdido.

Al terminar de leer algunas noticias, Ana Laura se digirió para la Academia de historia del Tolima a conseguir más información, pero en ese lugar no habían libros con esa información, sin embargo el señor que trabaja allí, le presentó a Marco Antonio Gómez Gómez, un periodista que tenía bastante información de los Teatros, entonces procedió a hacerle una entrevista donde Gómez Gómez dijo lo siguiente “De todos los Teatros, el único Vigente es el Teatro Tolima, ya que en los últimos 20 años empezaron a decaer, tanto así que los teatros ya no eran visitados con frecuencia, ya que las personas reproducían sus películas en video beam o Dvd’s donde los CD’s eran comprados en el comercio”.

Las salas de los Teatros eran un sitio agradable donde numerosas parejas se encontraban allí para disfrutar de las películas como “El matinal”, “Tarzán”, “Popeye” y “Cantinflas”, entre otras.

Luisa María y Dulce María, son dos hermanas que vivieron esa época, y la describen como un cuento de Hadas en los Teatros, cuentos como los que ellas y las demás personas usualmente llevaban a esos lugares para vender o intercambiar, ya que cuando esos cuentos habían sido leídos, los intercambiaban por otros que aún no habían leído y les encimaban algunos dulces, donde los más vistos fueron los de “Tarzán”, “Popeye”, “Santos”, “El mascarado de plata”, y “El caballero invencible”.

Luego de escuchar esa anécdota, Ana Laura se devuelve a unos años atrás, donde el cine que ha vivido ella es totalmente diferente a lo que ha escuchado en su trayectoria de la búsqueda de información de los antiguos Teatros y recuerda las salas del Cine moderno, como un lugar tranquilo, en algunos casos la silletería era cómoda, el ambiente era muy fresco y las pantallas eran adecuadas para generar concentración en los espectadores.

Desde su experiencia habla de la evolución que ha tenido el cine, a su vez también un impacto en la sociedad, ya que cuando ella empezó a ver películas en el cine moderno, principalmente eran en 2D, aunque afirmó que aún se ven, lo que causa la sensación de que se está viendo televisión, resaltando que la diferencia es que se proyecta en una pantalla grande, donde el sonido y la imagen se ve y escucha de una mejor manera. Dijo que más adelante llegó la oportunidad de que fuera 3D, lo que genera un efecto en las personas que en dicho caso usan las gafas, las cuales permiten que los espectadores sientan algunos efectos como las caídas, los golpes dados en la proyección y demás efectos como los que sintió Ana Laura en la experiencia que tuvo el día que cumplió sus 15 años, cuando junto con sus familiares y amigos, vieron una película en 3D en una de las salas de cine ubicada en Girardot- Cundinamarca.

Finalmente el cine 5D permite involucrarse a la persona en la acción, causando una serie de movimientos dados en una silla, donde unas gafas puestas. Por ende, Ana Laura describe el cine no solo como arte y cultura, sino también como una serie de diversión y espacios libres que se comparten en familia, pareja o amigos, donde esta herramienta debe usarse de manera adecuada.

De acuerdo a la experiencia de Ana Laura en los cines, es lamentable mencionar la época pasada donde existieron los Teatros en Ibagué, lo que hoy ya no existe, y se menciona que los días en que los Ibaguereños visitaban con más frecuencia las salas de los Teatros eran los viernes, sábados y domingos, ya que los novios de la época se encontraban en ese lugar y las invitaciones se realizaban allí, donde la entrada costaba alrededor de $50.

Retomando las experiencias de Luisa María y Dulce María, finalmente afirman con gran sentimiento que la época de los Teatros era hermosa, donde el respecto era primordial, el romance se vivía con placer y el maltrato hacia las mujeres no se escuchaba ni se vivía. Por ende, regalar una flor era un gesto que se les brindaba a las mujeres.

Lastimosamente con el impacto de la tecnología, los teatros fueron desapareciendo alrededor del año 1990, debido a que no había recursos para el sostenimiento de ellos y por ese problema, finalmente los teatros fueron vendidos y los convirtieron en negocios como parqueaderos, centros comerciales y otros actualmente simplemente son lotes.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Reportaje- Cinemas- Primer entrega
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